Musaka con patatas
La musaka es uno de los platos más conocidos de la gastronomía griega y aunque tiene unos ingredientes específicos, con este plato sucede lo mismo que con cualquier otra elaboración gastronómica, pueden hacerse infinidad de variedades diferentes. En este caso vamos a enseñaros a hacer una original musaka con patatas.
Ingredientes:
- 600 gramos de carne picada.
- 4 tomates medianos.
- 3 patatas grandes.
- 3 berenjenas grades.
- 1 cebolla grande
- Aceite de oliva virgen extra.
- Un brik de bechamel.
- Queso rallado.
- Sal y pimienta negra recién molida.
Modo de elaboración:
El primer paso es lavar bien las verduras y cortar las berenjenas en rodajas de medio centímetro aproximadamente. Las pondremos en un plato sobre papel de cocina, echaremos sal sobre todas las rodajas y dejaremos que suden y eliminen su amargor.
Las patatas deben ser lavadas, peladas y cortadas de la misma forma que las berenjenas.
Cuando hayan pasado unos 15 minutos calentaremos una sartén con abundante aceite de oliva y freiremos las berenjenas hasta que se queden un poco doradas y estén blandas. Volveremos a reservar las berenjenas en un plato con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite y también haremos lo mismo con las patatas.
En otra sartén echaremos un chorreón de aceite de oliva y sofreiremos la cebolla hasta que quede pochada, momento en el que agregaremos el tomate muy troceado y dejaremos que se vaya haciendo poco a poco durante unos 20 minutos.
Después agregaremos la carne, bien salpimentada y aumentaremos a fuego medio, removiendo para que la carne se vaya haciendo poco a poco.
Pondremos a precalentar el horno a 180/200 grados y mientras calienta montaremos la musaka dentro de una fuente honda especial para horno. Colocaremos una capa de rodajas de patata, después añadiremos una capa de berenjenas y sobre éstas una capa con la mitad de la mezcla de carne y tomate, cubriendo bien todos los huecos.
Añadiremos otra capa de patata y berenjena, otra con el resto de la carne y sobre ésta echaremos una última capa con la bechamel envasada que tenemos.
Sobre ella echaremos un buen puñado de queso y lo meteremos en el horno durante unos 30 o 35 minutos. Cuando acabe, a sacaremos, dejaremos que enfríe un poco y ya podremos servirla adornándola con unas hojas en la parte superior.
Consejos
Aunque la bechamel envasada puede ser una buena opción, siempre será mejor hacer nosotros la bechamel; el plato se hará un poco más difícil para hacer, pero merecerá la pena gracias a su sabor.